LA ABEJA MAYA

LA ABEJA MAYA

Albert Einstein, sin relativizaciones, dijo: «Cuando se muera la última abeja, cuatro años después, desaparecerá la especie humana».

Hace unos días un compañero hablaba de que el número de abejas llevaba tiempo reduciéndose y que ello podría ocasionar consecuencias inesperadas para el ser humano. Yo personalmente no soy demasiado partidario de los alarmismos, milenarismos y catástrofes pero el tema me llamó la atención porque hasta ese momento no me había preocupado de las abejas más allá que de tenerlas bien lejos de mí.

Así buscando información sobre el tema empecé a tomar conciencia del papel fundamental de este insecto en el desarrollo de los ecosistemas.

Desde mi ingenuidad cambio mi perspectiva sobre las abejas y de sólo verlas como productoras de miel y bichos molestos pasé a concienciarme del importante papel que realizan y del problema que tenían y teníamos.

En el año 2006 se aplicó por primera vez el término “problema de colapso de colonias” (en inglés, Colony Collapse Disorder), debido al drástico número de desapariciones en colonias de abeja, es decir, cuando el número de abejas obreras de una colmena desaparece de forma considerable.

El problema radica en el papel fundamental que tienen en la polinización, proceso por el que el polen es transportado, haciendo posible la formación de frutos y semillas. A pesar de que hay plantas que realizan la polinización por otros medios, la mayoría son polinizadas por las abejas y otros insectos y lo más trascendental entre estas plantas se encuentran árboles frutales, plantas hortícolas y flores, es decir, plantas que cultivamos.

Poco a poco a medida que iba conociendo la problemática comencé a ver con los ojos de mi compañero y a solidarizarme con sus inquietudes, el hecho era que la desaparición de las abejas sería una catástrofe para el medio ambiente y para la agricultura.

Si queremos hablar de números hasta el 75% de la flora silvestre y casi el 40% de las verduras y frutas que comemos, son polinizadas gracias a la acción de las abejas. La Unión Alemana de Apicultores estima en 22.000 millones de euros anuales las ganancias que posibilitan estos y otros insectos polinizadores.

Por una parte somos nosotros mismos los responsables de esta disminución del número de abejas

Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) no se ha identificado una única causa del descenso de la población de abejas. Sin embargo, se barajan varios factores asociados:

Por lo que también somos responsables de poner los medios adecuados para redirigir la situación y aquí se abre el camino para innovar y evitar la desaparición de dos especies, una de ellas la nuestra.

Y ahora visto desde otra perspectiva ayudar a la abeja maya a seguir teniendo aventuras junto a su amigo Willy.

 

Gobierno de EE.UU. propone plan para salvar la población …

www.emol.com/…/tecnologia/…/gobierno-de-estados-unidos-propone-pl…

 

 

 

 


Suscribirse a comentarios Respuestas cerradas, se permiten trackback. |

Comentarios cerrados.


Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies