Creación de valor y gestión cadena suministro
Hola a todos, quiero compartir con ustedes un árticulo que escribí para una universidad relacionado con este tema de la creación de valor, ojalá les guste.
La cadena de suministro y su importancia en la generación de ventajas competitivas.
Al momento de definir que es ventaja competitiva, existe un objetivo clave que toda empresa debe lograr; y es básicamente un “valor” diferenciador que permita a una compañía estar a la delantera de sus competidores, y que al final del día permita que sus productos se vendan mas en el mercado, sumado a un reconocimiento de sus clientes.
Según Porter, una firma es exitosa si el valor que produce excede la creación de su producto (Porter, 1985, p38) Con base en esta premisa, es importante para las empresas encontrar recursos para obtener ese valor diferenciador, y como volverla sostenible en el tiempo. Para
lograr valor, las empresas pueden recurrir a múltiples opciones y escenarios a explotar, dependiendo del análisis y el aprovechamiento de los recursos
disponibles, realizando un estudio minucioso de todo el ambiente de producción. Ejemplos de oportunidades de creación de valor pueden ser la innovación, el manejo de costos, la diferenciación, el servicio o en la especialización, enfocados en una o varias áreas particulares de la empresa, producto final, o
en el proceso de mercadeo y ventas.
En esta búsqueda de ventajas competitivas, las áreas de producción y ventas han sido históricamente las seleccionadas para el desarrollo y análisis de valor. Los adelantos científicos aplicados a nuevos e innovadores productos y el nacimiento del mercadeo y estrategias de ventas, colocaron a estas dos áreas como generadores de valor en las compañías. Sin embargo la creciente globalización, la escasez de recursos y la velocidad en las comunicaciones hacen que la competencia absorba y mejore las ventajas dadas, perdiendo sostenibilidad. Un ejemplo aplicable es el del gigante y el enano: un gigante tiene una vista muy superior del entorno, sin embargo, si un enano logra subirse a su cabeza, no solo tendrá la perspectiva del gigante, sino que sumada a la suya tendrá un mejor alcance. En términos de ventajas, una simple mejora en un proceso que ya es eficiente o en un producto que ya tiene un mercado ganado, puede lograr que el competidor pase a ser el “aventajado” en el mercado de dicho producto.
Debido al constante aumento de competencias, no solo locales sino transnacionales, las empresas empiezan a buscar oportunidades en otros procesos que antes eran considerados “de soporte” para la producción final. Es ahí donde la función de la cadena de abastecimiento empieza a ser un actor importante y a ser tomado en cuenta en las estrategias corporativas de las empresas.
Solo a finales del siglo XX, la función de la cadena de abastecimiento empieza a tener el reconocimiento como generador de valor y de ventajas competitivas en las compañías básicamente porque el gasto que se realiza en la compra de bienes y servicios, ya sean para manufactura o intermedios, aumenta cada vez más, representando entre el 50 y el 80 por ciento de los ingresos totales, por lo que la optimización del proceso de abastecimiento se vuelve clave para marcar la diferencia al momento de competir. La optimización se puede medir en términos de ahorro, disminución de tiempos de transporte y entrega, reducción de inventarios, mitigación de riesgo en las entregas, entre otras.
En términos de ahorro, cada peso ahorrado en compras es un peso que directamente va a las ganancias de la compañía, por lo que un esfuerzo mínimo en negociar puede tener un impacto significativo en las utilidades. Analicemos el siguiente ejemplo: el volumen de compras de una compañía representa el 50 por ciento de las ventas de la misma; mientras que su utilidad es del 5 por ciento. Una reducción del 2 por ciento en los costos de materiales significaría un aumento de la utilidad en un 40 por ciento! La pregunta que se debe hacer a los directivos es: ¿en cuánto tendrían que aumentar las ventas para lograr un aumento del 40 por ciento en la utilidad? En este punto la estrategia de negociación con los proveedores de suministro coloca a la compañía no solamente con reducciones de costos, sino con precios más competitivos, ya que estos ahorros también pueden ser destinados a ofrecer mejores costos a los clientes.
Un buen equipo de abastecimiento puede identificar y hacer seguimiento a los tiempos de transporte, procesos de aduanas, así como identificar posibles riesgos que se puedan presentar con el suministro de los bienes o servicios requeridos. Al llevar documentación de toda esta información, se pueden tomar acciones de mejora para corregir cuellos de botella en la entrega, diversificar proveedores o plantear estrategias de negociación (joint-ventures, partnerships etc.) con proveedores críticos de suministro, lo que garantiza la mejora de los tiempos de entrega que las empresas pueden ofrecer a sus clientes. Adicionalmente, si se genera una alineación entre las estrategias de ventas, los objetivos corporativos y la estructura de suministro, la empresa como organización es más eficiente en la presentación de soluciones a sus clientes, no solo para productos ya existentes, sino para soluciones particulares que puedan ser requeridas.
Como se ha explicado anteriormente, prestar atención a la función de la cadena de abastecimiento se traduce en ventajas competitivas para las compañías, lo que significa una gran oportunidad, pero a la vez puede convertirse en una amenaza si no se cuentan con las herramientas y los recursos necesarios para desarrollarla. Estudios muestran que las áreas de compras no representan ni el 2 por ciento del total de empleados de la compañía, pero si a esto le sumamos la falta de preparación y entrenamiento, podemos identificar fácilmente por qué muchas compañías se quedan rezagadas o simplemente no son competitivas en calidad, costos o tiempos de entrega.
En estos tiempos de globalización, se debe hacer énfasis en el análisis de las tendencias en abastecimiento, como las compras por internet, estandarización de las normas de comercio, grandes proveedores y su poder de negociación, escasez de insumos, regulaciones del mercado, los ciclos de vida de los productos y la responsabilidad social y ambiental. Sin un equipo entrenado y una estrategia definida, las oportunidades de encontrar ventajas competitivas pueden convertirse en amenazas latentes y exponer a las compañías a su desaparición. A medida que estos temas cobran importancia, las compañías deben tener la capacidad de reaccionar y fortalecer sus recursos respecto a su relevancia.
Estudios y evidencia están demostrando que la competencia no se da entre empresas o industrias sino en sus cadenas de abastecimiento, no solamente limitándose a su proveedor directo, sino a los proveedores de los proveedores, por lo que integrar todos los actores de la red de suministro garantiza no solo la tranquilidad del abastecimiento, sino el fortalecimiento y sostenibilidad de las ventajas competitivas en el mercado.
Para esto es importante la integración a la red de proveedores estratégicos que se identifiquen con el objetivo de nuestro negocio y aporten en sus procesos valor que luego puedan ser transferidos a nuestros clientes. Si hay competencia entre cadenas de abastecimiento, es importante integrar todas las actividades que afectan esta cadena, sobre todo a las que se encuentran fuera de la compañía. Una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil, y sin conocimiento de todos los eslabones, el riesgo de fallas aumenta.
Por eso, se vuelve cada vez más imperativo la creación de equipos con alta formación y entrenamiento en abastecimiento, así como su alineación como unidad de valor a la estrategia corporativa. De esta forma el valor agregado que pueda surgir de la gestión de suministro, se traduzca en la ventaja competitiva que su empresa este buscando.