DESFORESTACIÓN LEGALIZADA de la AMAZONIA BRASILEÑA
La nueva propuesta de ley forestal en Brasil, permite la desforestación de zonas antiguamente amparadas por las Áreas de Reserva y Áreas de Protección Permanente, permitiendo así la no restauración de las zonas desforestadas ilegalmente antes del 2008.
Se había conseguido frenar la deforestación de la selva Amazónica gracias a la presión internacional, las ONG’s y el gobierno brasilero (con las medidas que adoptó). Ahora se ha aprobado el nuevo código forestal, gracias al apoyo del sector ganadero y agrícola, a pesar de la oposición civil (actualmente se encuentra a revisión del Senado).
Intereses económicos vuelven a prevalecer sin tener en cuenta las repercusiones a nivel ambiental y social. De nuevo zonas desprotegidas, pérdida de la biodiversidad, disminución de la calidad/cantidad de recursos pesqueros, también la pérdida de suelo fértil, al permitir la deforestación y no recuperación del área incrementarán las emisiones de CO2 (se llegará a cumplir luego el Protocolo de Kioto??) , menor zona de ribiera protegida, entre otros, lo peor de todo, no se sancionará la no recuperación de las áreas deforestadas.
Es realmente contradictorio, Brasil consigue reducir las emisiones y ahora plantea un nuevo código forestal, tal como se comentó en Durban el pasado mes: ”Brasil ha presentado un buen progreso en la reducción de emisiones -de gases de efecto invernadero- provocadas por la deforestación, pero la amenaza de que esta trayectoria puede tomar una dirección radicalmente diferente con el nuevo código forestal es muy preocupante”.
Siendo el sexto país con mayores emisiones de CO2, y permitiendo la deforestación legal, también repercutirá directamente sobre el precio de los alimentos al reducir la zona de cultivo.
Esperemos que la presidenta Dilma Rousseff, tome conciencia de la situación y que el Senado revise dicha ley, dejando respirar a uno de los pulmones vitales del planeta.