Study trip to Shanghai: Jungla de Cristal (Domingo 6 de marzo)

Sí, sé que el título no es nada original, pero es que no se me ocurre uno mejor para describir lo vivido esta tarde :P .

Y es que, al igual que la mejor forma de meterte en el mar es coger carrerilla y tirarte de golpe, un grupo de 9 valientes decidimos agarrar al toro por los cuernos y lanzarnos a la aventura

a) Para empezar, viaje en metro hasta el subterráneo del Museo de la Ciencia de Shanghai. Desde el hotel hay que hacer tres transbordos, y escribir que el metro es caótico es quedarse muy corto: De un transbordo a otro te puede tocar salir a la calle y volver a entrar, el personal encargado en las estaciones lo único que sabe decir en inglés es “no speak English”, hay cientos de personas esperando a coger cada metro que no dudan en intentar quitarte de en medio si estás entre ellos en su destino,… Eso sí, para dar la nota optimista, es muy muy barato (el billete no llega a los 0,45 €). En definitiva, es un auténtico espectáculo que hay que vivir por lo menos una vez ^^

Shanghai: Entrando al metro

Shanghai: Marea Humana en el metrp

b) A continuación, visita al Yatai Market, que es a Shanghai lo que el Mercado de la seda es a Beijing.

Son unos 250 puestos que ofrecen de todo, desde ropa hasta cacharros electrónicos pasando por raquetas de tenis, recuerdos de Shanghai,… Nuestro botín de guerra: Relojes, sudaderas, cazadoras, equipaciones de futbol, corbatas … todo ello de las mejores “marcas” y a unos precios muy decentes (si se regatea bien, por ej, puedes conseguir corbatas a 1 €)

Shanghai: Compra de relojes en el mercado de falsificaciones

c) Ya casi acabando, cena en un McDonalds (para los que ya habían tenido demasiadas emociones fuertes) o en un japonés (para los que no), un paseo para bajar la comida por Nanjing Road y People’s Square, y vuelta en taxi al hotel. Medio de transporte que, comparado con el metro, es de precio similar, mucho más rápido…y el doble de peligroso: No importa si el semáforo está en verde o en rojo, cualquier lugar es bueno para hacer un cambio de sentido, el ídolo de los taxistas es claramente Michael Schumacher,…vamos, que llegas al destino con las tripas a la altura de la garganta :P

Shanghai: Paseo por Nanjing Road

Shanghai: Nanjing Road de noche

d) Y para acabar, todos nos juntamos en uno de los bares del hotel para tomar algo y acabamos montando un mini-show (con karaoke incluido)

En fin, uno que se va a dormir ya, que el día y medio que llevamos aquí ha dado muchísimo de sí, y hay que coger fuerzas para lo que se nos viene encima

Continuará…


Nota: Todas las fotos con buena calidad de este post han sido hechas por uno de los pedazo fotógrafos que tenemos en el grupo: Alfredo García Ferrero.

Sí, sé que el título no es nada original, pero es que no se me ocurre uno mejor para describir lo vivido esta tarde.

Y es que, al igual que la mejor forma de meterte en el mar es coger carrerilla y tirarte de golpe, un grupo de 9 valientes decidimos agarrar al toro por los cuernos y lanzarn

Sí, sé que el título no es nada original, pero es que no se me ocurre uno mejor para describir lo vivido esta tarde.

Y es que, al igual que la mejor forma de meterte en el mar es coger carrerilla y tirarte de golpe, un grupo de 9 valientes decidimos agarrar al toro por los cuernos y lanzarnos a la aventura

a) Para empezar, viaje en metro hasta el subterráneo del Museo de la Ciencia de Shanghai. Desde el hotel hay que hacer tres transbordos, y escribir que el metro es caótico es quedarse muy corto: De un transbordo a otro te puede tocar salir a la calle y volver a entrar, el personal encargado en las estaciones lo único que sabe decir en inglés es “no speak English”, hay cientos de personas esperando a coger cada metro que no dudan en intentar quitarte de en medio si estás entre ellos en su destino,… Eso sí, para dar la nota optimista, es muy muy barato (el billete no llega a los 0,45 €). En definitiva, es un auténtico espectáculo que hay que vivir por lo menos una vez ^^

os a la aventura

a) Para empezar, viaje en metro hasta el subterráneo del Museo de la Ciencia de Shanghai. Desde el hotel hay que hacer tres transbordos, y escribir que el metro es caótico es quedarse muy corto: De un transbordo a otro te puede tocar salir a la calle y volver a entrar, el personal encargado en las estaciones lo único que sabe decir en inglés es “no speak English”, hay cientos de personas esperando a coger cada metro que no dudan en intentar quitarte de en medio si estás entre ellos en su destino,… Eso sí, para dar la nota optimista, es muy muy barato (el billete no llega a los 0,45 €). En definitiva, es un auténtico espectáculo que hay que vivir por lo menos una vez ^^


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