Gestión de Recursos Humanos y Responsabilidad Social Corporativa en Empresas Globales.
La sostenibilidad es un concepto que está ganando relevancia global en los negocios, como también lo son las prácticas de responsabilidad corporativa. Estas últimas entendidas, como la respuesta de la compañía ante el efecto que su actividad tiene sobre las personas, de forma individual y colectiva. Incluyendo los propios empleados y las comunidades en las áreas donde se desarrolla el negocio y yendo un poco más lejos, el planeta y la humanidad al completo.
El mundo es cada vez más pequeño, gracias a los grandes avances en la tecnología de comunicación. Muchas compañías se expanden hacia otros países, buscando nuevos mercados, expandir el negocio, diversificar para disminuir riesgos, etc.. Estas empresa gestionan un recurso humano que comienza también a globalizarse, si la empresa logra transmitir su cultura empresarial más allá de las fronteras, comenzara a tener un recurso humano que vive en diferentes culturas con diferentes idiomas, pero con algo en común que los une, la cultura de la empresa y las reglas comunes que esta define, en definitiva una visión común. Con esta expansión nace el concepto de la responsabilidad de la empresa ante este fenómeno que aun tiene que aprender a manejar.
Cuando una empresa se hace global, un reto importante es garantizar el respeto a las diferentes culturas, ambientes de trabajo y desarrollo tecnológico. Reconocer estas diferencias y afrontarlas desde un programa adecuado de responsabilidad social corporativa puede suponer un salto importante en el valor de la empresa, a través del compromiso de sus empleados.
El departamento de recursos humanos puede jugar un papel muy importante, asegurando que la compañía adopta adecuados programas de responsabilidad social corporativa, de acuerdo a las necesidades propias de los empleados. También puede apoyar en el monitoreo de la adopción de estas prácticas, al mismo tiempo que documenta y comunica proactivamente el éxito de implementación de las mismas.
Los criterios usados para medir el éxito de estas prácticas están muy ligados al desarrollo del propio trabajo del departamento de RH. Estos criterios pueden incluir (sin ser exhaustivo): compromiso del empleado; salarios y beneficios justos y razonables; compromiso con la diversidad y balance vida personal versus trabajo; métodos de medida de evaluación de desempeño y sistemas de evaluación y entrenamiento adecuados.
Estos criterios (y otros) indicarían que una compañía es socialmente responsable y con una cultura abierta creando una atmosfera que refleja atractivo para los trabajadores actuales y potenciales, es decir atrae talento y por lo tanto crea valor para la empresa.
Ahora bien una estrategia de negocio que integra sostenibilidad tiene dos objetivos principales. El primero, en el que se enmarca lo ya comentado, es asegurar la sostenibilidad del negocio a largo plazo. El segundo, seria asegurar que el negocio contribuye a la sostenibilidad del planeta y es responsable en el corto y largo plazo con sus impactos en las comunidades la sociedad y el medioambiente.
Un empresa que consigue operar de esta forma estará consiguiendo dos cosas, por una parte mejorara su gestión interna al tener empleados más felices y motivados en sus puestos de trabajo y por lo tanto más comprometidos con los objetivos y cultura de la empresa y por otra parte estará creando valor para la compañía, al mejorar la percepción de la sociedad sobre su forma de actuar y finalmente sus productos o servicios.
Las sociedades, los clientes y los empleados actuales están demandando que se reinventen las compañías y asuman como objetivo, no solo generar ganancias sino la generación de un valor compartido con las comunidades. De la misma forma que las empresas más avanzadas reconocen que las necesidades de estas comunidades definen los mercados y las deficiencias de las sociedades provocan ineficiencias en el funcionamiento de los negocios. De esta forma, por ejemplo, un programa de apoyo a la mejora de formación profesional en jóvenes, puede estar proporcionando a medio o largo plazo, la mano de obra cualificada, necesaria para el propio desarrollo del negocio. De esta forma se está creando de un valor compartido entre la empresa y la comunidad.
Esta forma de actuar de la empresa, se convierte además en una potente herramienta de gestión de recursos humanos que el propio departamento de RH puede gestionar, fomentando que los empleados participen de la misma política a través de: voluntariados en programas financiados por el área de RSC, donaciones particulares sumadas a la de la empresa para proyectos concretos.etc. O apoyando al departamento de RSC a definir aspectos de los programas de acuerdo con las preferencias de los empleados.
Para ello es necesario que exista una relación estrecha de colaboración entre los departamentos de RSC y RH, con definición conjunta de objetivos y herramientas de seguimiento que incluyan indicadores de desempeño a usar por el departamento de RH.