Coaching Día a Día

Como actuales o futuros directivos, una de las tareas que debemos llevar a cabo es la de fomentar el desarrollo de los subordinados, y una buena forma de hacerlo es a través del coaching, en esta ocasión les comparto una serie de aspectos que pueden ser de utilidad para desarrollar esta tarea.

1) Use las tareas y responsabilidades actuales del empleado para construir las destrezas deseadas

Los supervisores deberían ser capaces de asignar las tareas a sus subordinados en base a las habilidades que éstos necesitan desarrollar para cumplir con su trabajo actual y futuro, sin embargo, lo que ocurre es que los supervisores asignan las tareas de acuerdo a las fortalezas del empleado para alcanzar los objetivos del negocio.

2) Anticipe y actué en base a las lecciones aprendidas en el trabajo diario

Muchos supervisores ayudan a sus empleados a recapitular las lecciones aprendidas de su trabajo por medio de discusiones posteriores que se enfocan en lo que marchó bien, en lo que marchó mal y en lo que el empleado debería cambiar en el futuro. Sin embargo, identificando las lecciones que se quieren aprender, antes de que inicie el desarrollo de un proyecto o tarea, tanto el supervisor como el empleado pueden estar seguros de que se están abordando las áreas que necesitan ser desarrolladas.

3) Aplique las lecciones aprendidas para incrementar su valor

Identificar una lección clave de una experiencia previa significa haber aprendido dicha lección, el próximo paso es asegurarse que dicha lección es aplicada de forma consistente. De hecho, una lección se aprende de manera completa hasta que es aplicada en el comportamiento futuro. Logrando que los empleados apliquen las lecciones del pasado en su trabajo futuro, el supervisor se asegura que sus esfuerzos de entrenamiento están contribuyendo al desarrolla de las habilidades deseadas en sus subordinados.

4) Aproveche las interacciones diarias que generan oportunidades de entrenamiento

La creación de un plan para el desarrollo de los empleados a través de las tareas y proyectos es una aspecto fundamental para asegurar que se cumplan los objetivos, no obstante, se pueden presentar una serie de eventos inesperados –como el éxito o fracaso de un proyecto- que también proveen oportunidades de aprendizaje. De hecho, muchos supervisores pasan por alto estos eventos, enfocándose solamente en el impacto del negocio, desaprovechando la oportunidad de hacer coaching en el momento.

Es importante recalcar, que no todas las interacciones con un empleado son oportunidades de entrenamiento, si usted insiste en ello, corre el riesgo de crear la percepción de que el esfuerzo de su empleado nunca es lo suficientemente bueno.

 

Basado en el artículo: Day-To-Day Coaching, Learning and Development Roundtable, Corporate Executive Board.

 


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